Saetas hay muchas
llorando en el jardín
es la más serena (para mí)
¡escucha escucha!
la de notas de lluvia
en su orquesta al discurrir
¡qué himno gris!
de gota y hermosura
¡qué alas oscuras!
escurriendo en nuestro nido
retejado de carmín
refractando la luna
transparente, te dijimos
lluvia, que no sabes mentir.