Me encuentra la soledad (mi soliloquio andante de vivir)

No puede estar mi soledad sin mí,
dormir sus días de amor solitaria,
pues es mi alma ceñuda su alma amada,
sombra atada que me ha de perseguir.

Mar triste del invierno en que me fui
los charcos sobre los que navegaba,
el reflejo gris donde tiritaba,
espejo mojado en que me escondí.

Otra vez me ha hallado la soledad,
tardes de lluvia, siempre sois así,
ella sueña en mi almohada de olvidar,

en mi colchón se esconde en su crujir,
y otra noche en mi lecho a susurrar
mi soliloquio andante de vivir.